Katarina Claes, de ocho años, es la única hija de un duque, viviendo su vida pacíficamente y sin incidentes hasta que se golpea la cabeza con una roca... y entonces recuerda que no es realmente la hija del duque. Ella solía ser una otaku que murió camino a la escuela después de pasar la noche anterior jugando Fortune Lover, su juego favorito de otome. Después de notar que su entorno actual le resulta extrañamente familiar, se sorprende al descubrir que se ha reencarnado en el mundo de los Amantes de la Fortuna como la villana. La villanía en el juego suele acabar muerta o exiliada, por lo que Katarina decide utilizar sus conocimientos del juego y sus rutas para evitar cualquier mala situación. ¿Pero es posible que la villanía tenga un buen final?
Katarina Claes, de ocho años, es la única hija de un duque, viviendo su vida pacíficamente y sin incidentes hasta que se golpea la cabeza con una roca... y entonces recuerda que no es realmente la hija del duque. Ella solía ser una otaku que murió camino a la escuela después de pasar la noche anterior jugando Fortune Lover, su juego favorito de otome. Después de notar que su entorno actual le resulta extrañamente familiar, se sorprende al descubrir que se ha reencarnado en el mundo de los Amantes de la Fortuna como la villana. La villanía en el juego suele acabar muerta o exiliada, por lo que Katarina decide utilizar sus conocimientos del juego y sus rutas para evitar cualquier mala situación. ¿Pero es posible que la villanía tenga un buen final?